Tania Gabriela Rodríguez Morales[1].
La discusión a que se ha visto abocada la sociedad colombiana las últimas semanas sobre la existencia o no del dinero de las Farc obtenido de décadas de secuestro, extorción y sobre todo del elemento que les dio el gran salto estratégico, el narcotráfico es el elemento “nuevo” dentro de esta forma de sobrevivencia de los grupos terroristas.
El tema de la financiación de grupos terroristas es quizá el menos investigado dentro de los estudios de terrorismo, sin embargo, quienes lo han estudiado identifican un sistema ideado para tales fines: “[…] las tres fuentes principales de financiación de los grupos terroristas provienen de: 1) De los Estados u organizaciones con infraestructura lo suficientemente grandes para tener los fondos y hacerlos llegar a las organizaciones. 2) De actividades criminales de las que se obtienen beneficios, como el secuestro o la extorsión, el eufemísticamente llamado “impuesto revolucionario”. Aunque también con los robos a gran escala, los timos, los fraudes y el tráfico de drogas, etc. 3) De actividades aparentemente legales como pueden ser la utilización de las ONG u otras organizaciones humanitarias, o de entramados empresariales creados únicamente para financiar a las organizaciones. De esta manera, se puede decir sin caer en el error, que las actividades terroristas se financian tanto por fuentes legítimas como ilegítimas” (Sanchez Medero, 2008).
La noticia de la revista británica impactó en el país, al punto de que director de la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF) presentó su renuncia. “En diferentes momentos, la UIAF ha hecho estimaciones que no han arrojado resultados concluyentes que permitan dar cifras confiables sobre este tema, debido a la falta de información, la poca fiabilidad de algunas fuentes y las inconsistencias en los datos” (UIAF, 2016).
El gobierno colombiano afirma no saber dónde se encuentra el dinero del grupo. “En este tema escandalo tercio el fiscal (e) Perdomo había dicho el pasado lunes la Fiscalía tiene "mucha información" sobre el dinero de las Farc, tras la polémica generada por el artículo del diario británico The Economist sobre la financiación de la guerrilla […]Luego de investigar las diferentes formas de financiación de las Farc a través del secuestro, la extorsión, la minería ilegal y el narcotráfico, la Fiscalía establece que parte de ese dinero está invertido en el exterior, principalmente en países centroamericanos” (RCN, 2016).
La relación grupos terrorista-narcotráfico no es nueva, la economía de estos grupos se descentralizo en la década de los ochenta con el M19 y su alianza con el Cartel de Medellín que hizo posible la Toma del Palacio de Justicia. “Sin embargo, no solo el M19 tuvo acceso a las finanzas provenientes del narcotráfico, también otros grupos terroristas colombianos entraron en el negocio y esto tuvo que ver con que los autodenominados grupos leninistas distinto a grupos subversivos de Centroamérica no recibían financiamiento del bloque soviético, por lo que vieron oportuno pactar con los narcos para sobrevivir y llevar a cabo su plan, la toma del poder” (Rodriguez Morales, 2014).
Posterior al debate en los medios de comunicación donde la sociedad se manifestó sobre el tema resulto que la noticia de The Economist terminó siendo refrendada de forma tácita por el gobierno al citar al Director de la UIAF y su posterior renuncia. “La Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF), informa que el pasado 3 de marzo de 2016 el director de la entidad, Luis Edmundo Suárez, concedió una entrevista off the record a la corresponsal de The Economist en Colombia, una condición que durante estos cinco años ha sido política de la entidad para recibir a los medios de comunicación […] Con respecto a la entrevista concedida, ni el Presidente de la República ni el Ministro de Hacienda tuvieron conocimiento de forma oportuna. Solo hasta el día de ayer se les informó sobre los hechos ocurridos. […] Ante las circunstancias descritas, el Director de la UIAF ha presentado renuncia ante el Señor Presidente de la República” (UIAF, 2016).
El proceso de la Habana entra –según las encuestas- en una falta de credibilidad en su recta final, es necesario que las realidades que rodean al grupo terrorista sean dadas a conocer por el gobierno y no lo contrario, si no se hace un esfuerzo por ello, será prácticamente posible conseguir de la sociedad la aprobación al mismo.
[1] Profesora tiempo completo de la facultad de Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Santo Tomas (Bogotá). Directora de Publicaciones, profesora de Política Exterior Comparada, Derecho Internacional Público Comunitario, Investigación Asistida. Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Necesita activar JavaScript para visualizarla.
REFERENCIAS.
RCN, N. (28 de abril de 2016). noticiasrcn.com. Obtenido de noticiasrcn.com: http://www.noticiasrcn.com/nacional-dialogos-paz/vamos-ir-tras-el-ultimo-dolar-podamos-encontrar-las-farc-minhacienda [Consultado 25 de abril de 2016]
Rodriguez Morales, T. G. (2014). Nuevo escenario de las Fuerzas Militares de Colombia, proyeccion 2030: transformacion y adaptacion. En U. d. Granada (Ed.), I Congreso Internacional de Estudios Militares (págs. 1-20). Granada: Universidad de Granada.
Sanchez Medero, G. (2008). Las fuentes de financiacion legales e ilegales de los grupos terroristas. Revista Política y Estrategia(112), 50-74.
UIAF. (19 de abril de 2016). uiaf.gov.co. Obtenido de uiaf.gov.co: https://www.uiaf.gov.co/index.php?idcategoria=28358 [Consultado 25 de abril de 2016]